María Forteza, una nueva pionera para la historia del cine español

El gato montés (Rosario Pi, 1935) era hasta ayer la primera película española con sonido que había dirigido una mujer. Hoy la historia del cine español podría haberse reescrito: si los cálculos son ciertos, Mallorca (1932-1934), un corto de homenaje a la isla firmado por María Forteza, sería ahora la primera. La Filmoteca España pone durante unos días a disposición online gratuita esta película, digitalizada justo antes del confinamiento por el coronavirus. El nombre de María Forteza, desconocida antes y un enigma ahora para los investigadores, se puede colocar ahora junto a las pocas pioneras conocidas del cine en España como la citada Pi, Helena Cortesina, Margarita Alexandre y Ana Mariscal.
El descubrimiento casual de María Forteza y su Mallorca
Títulos de apertura de ‘Mallorca’, de María Forteza
¿Cómo se ha llegado ahora al descubrimiento de este nombre y esta película? Según explican desde Filmoteca Española, por casualidad rutinaria. La institución tiene un protocolo para ir digitalizando sus archivos más antiguos para que no se pierdan. Esta película, fechada erróneamente en el año 1926, entró en ese proceso. Revisada y finalmente escaneada poco antes del estado de alarma, los trabajadores de la institución la encontraron en sus discos duros cuando buscaban material para su iniciativa #DoréEnCasa, en las que se comparten por Internet películas de su archivo durante el confinamiento.
Hubo que esperar a la cuarentena para que alguien viera por primera vez Mallorca, que había llegado a las manos de Filmoteca en 1982. Antes de eso era imposible que alguien se diera cuenta que la ficha técnica con la que llegó a sus oficinas estaba mal. Cuando se hizo la primera inspección técnica del material, los trabajadores anotaron rápidamente que era sonora. Es decir, que la película no podía ser de 1926 porque el sonido llegó a España en 1929. Pero lo más llamativo llegó en cuanto pudieron ver el material: el director al que se le atribuía este documento en la ficha (Francisco Aguiló Torrandell) era otro. En el primer segundo del filme se puede leer que la dirección fue de una tal María Forteza.
El rastro de Ramón Ubeda, la clave
Después del impacto de leer un nombre diferente, y además femenino, se cae en que el de la productora en la ficha también es incorrecto. El productor se llamaba en realidad Ramón Úbeda. Un nombre que ha resultado decisivo en la investigación: gracias a su rastro histórico se ha podido fechar Mallorca entre 1932 y 1934. Primero porque se sabe que Úbeda fijó su residencia en Barcelona en 1935 y, segundo y más importante, porque aquel año consta que registró una marca de sonido cinematográfico llamada Fono Palma. Si la película fuera de ese año o posterior, lo normal sería que Fono Palma debería de haber aparecido en algún momento en la película, y no lo hace.
Sólo el rastro de las migas de pan de la vida de Úbeda nos han proporcionado estos datos sobre una película, que, según las propias palabras del director de Filmoteca, Josetxo Cerdán, «que aparecía ante nosotros como llegada de ninguna parte». No hay evidencia alguna, hasta el momento, de su estreno, pero tampoco registros, anotaciones en libros, noticias o pistas que den alguna información sobre la producción de Mallorca. Lo más probable, aseguran desde Filmoteca, es que muy pocas personas vieran esta película incluso en los años 30.
¿Quién fue María Forteza?
El mayor enigma es, sin embargo, el de María Forteza. No se sabe nada sobre esta mujer. No aparece en la prensa de la época y ningún historiador del cine (al menos, los hasta ahora consultados) ha oído nunca mencionar su nombre. El único dato que se puede extraer sobre ella es que su apellido es común en Baleares, y nada más. En Filmoteca se preguntan de forma abierta quién fue María Forteza, una mujer que ha sido completamente «borrada de la historia», algo que, explican, «subraya lo que la historiografía y la teoría feministas vienen subrayando desde hace décadas». La investigación, fuera del confinamiento, puede avanzar.
Hasta el 8 de mayo a las 12:00 se puede ver Mallorca, un paseo en imágenes por la isla mientras suena la música del compositor Isaac Albéniz, al que va dedicado el filme. En la hoja de sala proporcionada por Filmoteca, la historiadora del arte Catalina Aguiló Riba, define así la película: «Un documento sobre los cambios que se han producido en muchos rincones de nuestra ciudad. Fuera de ella, nos encontramos con los tópicos del paisaje mallorquín como los campos de olivos, los rebaños de ovejas y las vistas de la Foradada, que otros documentales anteriores ya habían explotado visualmente. Una maravilla, de gran calidad estética, para conocer la vieja Palma».